Mediante un comunicado, padres de alumnos preuniversitarios de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) manifestaron su total conformidad con la reunión mantenida el pasado jueves con la rectora Esther Sánchez donde se definió que los docentes recibirán su sueldo por los días trabajados y no será igual cuando no se hayan presentado en el aula.
“Mendoza marca nuevamente un precedente en defensa de la presencialidad, algo que ya se había hecho durante la pandemia y ahora esta medida también se analiza en otras casas de altos estudios”, indicó Jorge Fuentes, uno de los padres involucrados.
Lo cierto es que esta resolución administrativa, que nada tiene que ver con el denominado “ítem aula” toma a la educación como un servicio y, por ende, se pagará en tanto y en cuanto se preste.
“No se va a salir a quitar presentismos ni serán sancionados o suspendidos quienes adhieran, simplemente el rector, que es el máximo responsable de los fondos, no pagará servicios educativos que no se presten”, insistió Fuentes, para agregar que descansan en la legislatura dos proyectos que, efectivamente, hablan de la educación como un servicio esencial.
“Asistimos a una reunión convocada por la rectora con el objetivo de que se nos comunique los pormenores de la decisión de pagar el servicio educativo efectivamente prestado a partir de la semana del 27 de marzo, reafirmando que es prioritario mantener las clases, sobre todo en el nivel preuniversitario, que se ven afectadas por los recurrentes paros convocados por FADIUNC”, sostuvo.
Además, la rectora nos aclaró que esta medida no es en contra de los docentes, a quienes entiende y acompaña.
“Esta es una medida en favor de los estudiantes, ya que responde a la necesidad de garantizar el derecho a la educación. La medida, que se toma con posterioridad de varias charlas y consultas tendientes a buscar y encontrar soluciones consensuadas, tiene en cuenta el Art. 27 del Estatuto Universitario que indica que son deberes y atribuciones del rector ejercer la representación de la universidad y dirigir la gestión administrativa, contable, patrimonial y la superintendencia sin perjuicio de las atribuciones conferidas al Consejo Superior por este estatuto”, continuó.
“En este caso no es necesaria una resolución, sino que simplemente se cuenta con el respaldo del estatuto universitario que da atribuciones a la rectora de dirigir la gestión administrativa, contable y patrimonial de la universidad”, dijo.
Por tal motivo, agregó, haciendo uso de sus deberes y atribuciones, la rectora habilitó a “pagar a todo el personal de esta universidad los haberes de los días efectivamente trabajados, según constancia fehaciente”.
“Sánchez destacó en la reunión que la medida se toma teniendo en cuenta, principalmente, a los alumnos destinatarios del servicio educativo y perjudicados por su falta. Y considera que mantener la presencialidad es fundamental en los colegios secundarios. Esta debe garantizarse siempre y el reclamo docente no puede fundamentarse en el perjuicio de la educación de nuestros hijos”, sostuvo.
Además, dijo que la responsable de la DIGES, María Ana Barrozo, también presente en la reunión, comparó los efectos dañinos de los paros con los observados durante el aislamiento en la pandemia; remarcando que la falta de interacción presencial de los adolescentes, falta de guía docente y la discontinuidad en los cronogramas planificados dificultan y arruinan el aprendizaje. También la rectora remarcó el accionar de FADIUNC (adherido a Conadu Histórica), que se ha mantenido inflexible, puesto que de los 58 colegios de Universidades Nacionales relacionados con el gremio, los de la UNCuyo han sufrido más días de paro que los de otras provincias.
“Al finalizar la reunión, la rectora nos solicitó el apoyo explícito desde nuestro rol de padres para seguir defendiendo la educación de nuestros hijos”, dijo, para añadir: “Por nuestra parte, solo resta decir que estamos totalmente de acuerdo y apoyamos esta medida que tiene como único fin tratar de restablecer el normal dictado de clases y salvaguardar el derecho a la educación de las niñas, niños y adolescentes, tal como lo establecen las distintas normas legales. Siempre dijimos y reiteramos que respetamos y apoyamos el reclamo salarial, pero no apoyamos el paro sin dictado de clases, ya que vulnera el derecho de nuestros hijos a la educación”.
“Instamos, por lo tanto, a buscar medidas alternativas de protesta y visibilización, las cuales estaremos dispuestos a adherir, siempre que no sean perjudiciales para los alumnos. Y por otro lado, a que los respectivos reclamos laborales, los realicen ante las autoridades que tienen el deber y la responsabilidad de resolverlos, ya sea el Mininisterio de Educación de la Nación, el Mininisterio de Trabajo y el Poder Ejecutivo Nacional. Finalmente, queremos agradecer el esfuerzo, la predisposición y el espíritu conciliador que recibimos por parte de la UNCuyo, especialmente de esta gestión, con la rectora a la cabeza, que siempre mantiene abiertos los canales de comunicación con las familias de los colegios preuniversitarios”, concluyó el comunicado de los padres.