Hoy comienza a debatirse en el Congreso un proyecto de ley que apunta a que los días de paro se garantice que las escuelas estén abiertas y con un porcentaje de los docentes presentes. La propuesta ha contado con un amplio aval de legisladores y genera un fuerte rechazo del sector gremial por lo cual hoy realizan una jornada de lucha.
Es conocida como la ley Finocchiaro, ya que ha sido impulsada por Alejandro Finocchiaro, del PRO y quien fuera ministro de Educación de la Nación entre 2017 y 2019. Sin embargo, tras pasar por la comisión de Educación ha contado con un amplio aval de diversas fuerzas políticas en Diputados, donde inicia el tratamiento. Se han manifestado a favor legisladores del PRO, la Libertad Avanza, UCR, Coalición Cívica , Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal.
El proyecto apunta a declarar a la educación como un “servicio estratégico esencial”, y aunque no impide la protesta, exige que haya una planificación previa para garantizar la presencia de docentes ese día.
Entre lo más sustancial, determina que los días de paro, debe estar presente el 30% del personal del establecimiento. Esto durante los dos primeros días de huelga, pero si se extendiera, a partir del tercero esa proporción deberá ascender a 50%.
Unión por la Patria y la Izquierda rechazan la propuesta por considerar que busca restringir el derecho a huelga.
Rechazo del Sute en Mendoza
En Mendoza, el Sute manifiesta su drástica oposición y salió a las calles con su reclamo para reunirse en el kilómetro 0. “Estamos en una jornada de lucha nacional porque buscan declarar a la educación pública un servicio esencial. Con esto dice el gobierno que garantizaría más días de clase, limitando el derecho de huelga a los docentes”, manifestó la titular del gremio, Carina Sedano.
Ante esto, preguntó: ¿Y qué tendrían las escuelas abiertas? “Escuelas abiertas con un desfinanciamiento que venimos transitando desde el año pasado. Escuelas abiertas que no tendrían recursos, que no tendrían merienda para todos los estudiantes, escuelas abiertas que no tienen computadoras, que no tienen libros, que no tienen programas nacionales, las escuelas técnicas no tenían recursos de internet, con obras paralizadas de infraestructura, sin garantizar el Fonid con los trabajadores de educación con malos salarios”, enumeró como respuesta.
En ese mismo sentido opinó: “El camino que pretende el gobierno nacional es un desfinanciamiento de la educación, perseguir a los trabajadores que se organizan para que no podamos reclamar mejores condiciones laborales, mejores condiciones salariales y mejores condiciones para nuestros estudiantes y para la comunidad educativa, con un solo fin, privatizar la educación”.
A nivel nacional, CTERA convocó para este miércoles a una “Jornada nacional de lucha” por lo cual se movilizarán al Congreso. Otra de las medidas de rechazo que ha anticipado el gremio es una “gran Marcha Federal Educativa” que se haría en septiembre.
Qué dice el proyecto que declara la educación como servicio esencial
La propuesta determina que debe haber una planificación previa para asegurar el servicio ante la huelga. Esto implica que directivos de los colegios deberán informar a las autoridades sobre la “nómina anual del personal docente y no docente que estará afectado al cumplimiento” de esta medida. Deberán hacerlo a comienzos del ciclo lectivo.
Además, deberá garantizarse la prestación del servicio de alimentación escolar y el cumplimiento de la cantidad mínima de días de clase, que es de 190 según el compromiso asumido por el Consejo Federal de Educación.
En tanto, se computará como ausencia injustificada, si el personal docente y no docente afectado a las guardias mínimas no asistiera esos días.
En principio, se cree que contará con los votos necesarios en Diputados para su media sanción.