Los usuarios del servicio eléctrico de gran parte de la provincia se encontraron con un aumento inesperado en el cargo por alumbrado público. En algunos casos, este concepto llegó a equiparar lo que pagan por sus consumos de energía, más impuestos nacionales y provinciales. El cargo depende de la categoría de cada cliente, pero va de $244 a $612 para los residenciales (bimestral), y de $1.100 a $1.222 para las “Grandes Demandas” (mensual). Estos últimos serán los más afectados.
Según explicaron desde el Ente Provincial Regulador Eléctrico (EPRE), “con el fin de unificar la tarifa de Alumbrado Público, mediante el sistema solidario contemplado en la Ley 9219/2018 para los municipios que lo integran: Lavalle, Santa Rosa, Junín, San Carlos, Luján, Gral. Alvear, La Paz, Tupungato, Malargüe, San Martín, Maipú y Rivadavia y por solicitud de dichos Municipios, mediante Resolución 91/2019 se pusieron en vigencia los nuevos cargos del Servicio de Alumbrado Público, regulados por las tasas municipales de cada departamento”.
Hasta el 2017 existía un valor único por el concepto “alumbrado público” para todos los usuarios, pero como la recaudación no siempre alcanzaba para cubrir el total de gastos de algunos municipios, se ejecutaba un “fondo compensador”, que contrarrestaba la baja recaudación de los departamentos con menos habitantes, con la de los municipios con mayor población. En 2018 se dio de baja ese fondo y se definió que cada comuna debía fijar una grilla de cargos para cobrarle a los usuarios, y pagarle a las empresas distribuidoras las facturas que surjan por el concepto de alumbrado.
Los departamentos que detalló el EPRE no actualizaban estos cargos (la grilla) desde diciembre de 2017. El ajuste, por tanto, será un impacto grande. Especialmente para el sector rural.
No obstante, en las facturas ya se incluye el concepto bimestral, que ahora se unificará bajo el nombre “CAP” (cargos del servicio de alumbrado público), con nuevos valores. De esta forma, un usuario de Maipú (T1-R1 por el tercer periodo de 2020), pagó en su factura anterior un cargo de $223, según la ordenanza 6.343 de dicho municipio, y uno de Junín, por ejemplo, $182,30 (Ley 6498, Cap. XII).
El aumento para el sector rural
Con la actualización que solicitaron los municipios, el cargo por alumbrado público bimestral pasó a tener un costo de $244 para la categoría R1, de $440 para R2 y $612 para R3. Los usuarios con tarifa social tienen un 50% de descuento, y se exime del pago a los electrodependientes. Para la tarifa “general” bimestral, el cargo es de $900.
En tanto que las Grandes Demandas pagan de forma mensual $1.100 (baja tensión) y $ 1.222 (media y alta tensión). Esta situación generó objeciones por parte de los referentes de las zonas productivas, y es que consideraron que incluir un cargo de alumbrado público, en zonas en donde muchas veces el servicio es inexistente, resulta al menos injusto.
“Para el sector productivo es imposible pagar cualquier aumento. El fondo compensador ya no existe más y ahora los municipios tienen que hacerse cargo de pagar el alumbrado público. Resulta imposible afrontar un cargo fijo de $900 (Pequeñas demandas “general”), que lleva una factura a $2.000, a veces por un pozo que no se usa”, indicó Gabriela Lizana presidenta de Aproam (Asociación de los Productores del Oasis Este Mendocino).
Según indicó la empresaria, el cargo recae sobre viviendas que están “en el medio del campo” (o pozos, porque tienen boletas aparte, y el cargo en esos casos es doble), en donde el acceso al alumbrado público resulta muy lejano, y golpea a productores que tienen una rentabilidad muy reducida (cercana al 6%), sobre el precio final de su producto. “No podemos sumar ningún costo extra, con una participación como esta y en agosto nos aparecieron cargos duplicados”, apuntó.
De igual manera, Mauro Sosa, del Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, comentó que pidieron explicaciones al Consejo Consultivo del EPRE para conocer qué abonan los usuarios. “Se trata de un cargo solidario porque en las calles del campo a veces no hay ni un foco”, subrayó.
Aplicación del cargo
“Empezamos a facturar con una tasa por alumbrado público, que lo van a pagar todos los usuarios, en nuestro caso de San Martín, tengan alumbrado público o no. La gente percibe que aumenta la luz, pero en realidad no hay suba: este mes se está pagando el bimestre más bravo de pandemia, que fue junio y julio, con la gente calefaccionándose en sus hogares, con un consumo de kW nuevo, y a esto se le suma el concepto de alumbrado público”, explicó José Álvarez, titular de la Federación de Cooperativas Eléctricas de la República Argentina, y de la distribuidora eléctrica.
“En las zonas rurales es en donde más injusticias se verán, porque hay casas cada 1 km, o más”, agregó, y explicó que antes de esta unificación de cargos, se tenían en cuenta la ubicación de la vivienda, y si la misma estaba retirada o no de las calles alumbradas.