Los cajeros automáticos ofrecen la opción de imprimir un ticket al finalizar una transacción, mostrando el resumen y saldo restante. Sin embargo, esta práctica podría ponerte en riesgo. Por este motivo te contamos por qué evitarla y cómo mantener tus datos seguros.
LOS RIESGOS DE IMPRIMIR EL TICKET DE LOS CAJEROS
Hay dos peligros principales. El primero es que tu información personal queda expuesta. Los comprobantes impresos contienen datos sensibles que, si caen en manos equivocadas, pueden ser utilizados para cometer fraudes o estafas.
El segundo riesgo es el peligro de desechar los tickets sin antes haberlos destruido. Puede pasar que un tercero lo recupere y utilice tu información bancaria e incluso permitiendo que alguien acceda a tus cuentas. Otra opción es conservar los comprobantes.
CÓMO PROTEGERTE
Para minimizar riesgos tanto en cajeros automáticos como en operaciones online, seguí estas recomendaciones:
- No compartas tus claves: Ninguna entidad bancaria solicita tus contraseñas, números de token de seguridad ni datos sensibles a través de llamadas, e-mails, redes sociales o WhatsApp.
- Evita proporcionar datos completos: Los operadores de bancos no deben pedir números completos de tarjetas mientras te guía en el cajero automático. En caso de asistencia telefónica nunca des tus claves.
- Verificá la seguridad del remitente: Asegurate de que las comunicaciones del banco provengan de URLs con “HTTPS” y un candado visible.
- Activá alertas de consumo: Desde tu home banking, habilitá notificaciones que te informen sobre movimientos en tus cuentas. En caso de sospecha, contactá directamente al número oficial del banco, disponible en el dorso de tu tarjeta.
Como consejo extra, en lugar de imprimir tickets, revisá tus operaciones a través del home banking o aplicaciones móviles. Así evitás riesgos innecesarios y tendrás un registro digital seguro.
