Una postal preocupante se repite desde hace varias mañanas en la vereda de la esquina de Salta y Alem, de Ciudad. Más precisamente a la altura del ingreso a la nueva guardia del hospital Central, destinada a enfermedades respiratorias en este contexto de pandemia. Sobre todo después de las 10, es común ver a una gran cantidad de personas agolpadas, aguardando para ingresar al edificio y bien lejos de cumplir con las recomendaciones de distanciamiento social.
Pero a esto, de por sí preocupante, se agrega un detalle importante: ellos mismos reconocen ser pacientes que han sido derivados de otros hospitales para que se les practique un hisopado PCR a fin de determinar si están contagiados de coronavirus. Es decir, y de acuerdo a sus palabras (muchos las complementan con el papel donde figura la constancia del pedido), son sospechosos de estar contagiados.
Consultados por esta situación, desde el hospital Central dijeron no tener conocimiento fehaciente de esas filas concretas de sospechosos que se forman en la vereda del establecimiento. Al mismo tiempo advirtieron que quienes llegan con una orden para que se les realice este test lo hacen con especificaciones claras de día y horario. Esto último justamente porque se ha coordinado dentro del sistema de salud para que quienes se encuentran involucrados -generalmente contactos estrechos con casos ya confirmados- no queden a la deriva ni expuestos a contagiar a otros.
No obstante, reconocen que es muy común que se concentre una importante cantidad de gente (muchos acompañantes, por ejemplo) todas las mañanas, por lo que insisten en que la ciudadanía no vaya al hospital si no se trata de una urgencia.
Desorden
Cada mañana el panorama se repite. Gente que va llegando y se forma en la vereda de esa ya de por sí transitada esquina céntrica. Prácticamente todos con tapabocas, se van acomodando a la espera de ingresar al Central. Muchos se bajan de los colectivos en esa misma esquina o a unos metros, ya sea por Alem o por Rioja. Y algunos ya se han resignado a pasar casi toda la mañana en el lugar.
“Desde las 11 de la mañana estoy esperando acá. Me han dicho que es urgente porque me he hecho ver por una doctora que me derivó, y me tienen parado acá. Puedo ser una persona asintomática y estoy esperando en la vereda”, se quejaba en voz alta Darío el miércoles en esa vereda. Mientras agregaba que hacía tres horas esperaba. Orden en mano, el hombre explicó que había sido derivado al Central para practicarse el PCR ante la presencia de síntomas sospechosos.
También ante la consulta de Los Andes, otras personas agregaron que habían llegado derivados de otros hospitales, como el Lagomaggiore, o que habían tenido síntomas sospechosos y habían decidido ir por sus medios al Central, directamente y sin turno.
“No debería haber gente esperando para que se le practique el hisopado, de ninguna manera. Para ingresar al hospital para que se le practique el test, a estas personas se les da un turno bien específico. A lo sumo, tienen que esperar en una salita interna y no mucho tiempo”, indicaron desde el efector público.
Además, descartaron que a primera hora de la mañana se forme una fila extensa en el exterior del hospital, ya que coincide con el momento en que se hace la revista de sala con el cambio de acompañantes de quienes están autorizados a tener a alguien consigo. Cada vez que cualquier persona ingresa -por más que ya haya estado adentro y haya salido unos minutos- se les hace el triage, donde se les realiza un cuestionario base y le toman la temperatura.