El gobierno de Mendoza anunció un plan para terminar el hospital de Lujan de Cuyo, obra inconclusa que comenzó a levantarse hace una década sin que se haya concluido aún y que hoy se llama Consultorios Externos Luján.
El anuncio lo hicieron el gobernador Alfredo Cornejo y el intendente de Luján de Cuyo, Esteban Allasino, junto con los ministros de Salud, Rodolfo Montero y de Infraestructura, Natalio Mema.
El principal anuncio fue que el centro asistencial, ubicado en Acceso Sur y calle Quintana, Perdriel, será terminado a través de un sistema donde el sector privado completará las obras pendientes y gerenciará el hospital, bajo un modelo de gestión privada aplicable a un centro sanitario público.
El hospital hoy está en el 50 por ciento de su ejecución y las instalaciones son utilizadas con algunos consultorios de unas pocas especialidades, el sistema de vacunación provincial y un área de atención a personas con problemas de adicción. También funciona allí el Área Departamental de Salud de Luján de Cuyo.
El mandatario y los funcionarios sostuvieron que se adoptará “un modelo que ha demostrado ser exitoso en sistemas de salud a nivel internacional para mejorar la eficiencia en la prestación de servicios de salud”.
Por eso, el Ministerio de Salud llamará a licitación a fin de transparentar el proceso y abrir el diálogo a posibles interesados para optimizar la propuesta. La iniciativa permitirá la concesión del hospital a un operador privado por un período de quince años.
Durante el mes de enero de 2025 se publicará un borrador de los pliegos licitatorios “para garantizar la transparencia y recoger sugerencias”.
Los habitantes de la zona más cercana al edificio asistencial sostienen que una de las prioridades es establecer un servicio de guardia para emergencias, como incidentes de tránsito en el área.
Otras de las partes que faltan y son prioridades de un hospital es la construcción de quirófanos y su equipamiento, además de las salas de internación de pacientes y los servicios complementarios.
Se aclaró que esta fase de ejecuciones no incluirá la atención de accidentes graves ni casos pediátricos críticos, aunque se espera que se pueda cubrir hasta 90% de las consultas habituales del sistema público.
Privados, obra y gestión
El Gobernador dijo que “el sistema de salud pública es una competencia estrictamente provincial, y aunque enfrentamos desafíos como el aumento desmedido del precio de los medicamentos y la falta de especialistas críticos como pediatras o terapistas, estamos avanzando con un programa definido para resolver estos problemas”.
En ese sentido, explicó que el hospital será licitado con un sistema donde “el sector privado complete las obras pendientes, como quirófanos y áreas de internación, y que gerencie el hospital bajo un modelo de gestión privada para un hospital público”.
Otro aspecto importante es que el Estado provincial financiará la atención de los pacientes sin cobertura social, mientras que el privado deberá cobrar las prestaciones a las obras sociales.
Resumen de lo anunciado
El proyecto se desarrollará en dos etapas clave:
Primera etapa: el operador privado tendrá que habilitar los consultorios médicos y servicios de atención ambulatoria con horario acotado.
Segunda etapa: se exigirá al concesionario realizar inversiones para ampliar los servicios del hospital. Esto incluirá la incorporación de internación, quirófanos y otras prestaciones que permitirán categorizar al establecimiento como un hospital de baja complejidad (nivel 1).
La propuesta también define un esquema de acceso a los servicios del hospital: entre 40% y 60% de los pacientes atendidos serán personas sin obra social, con prestaciones financiadas por el Ministerio de Salud a través del nomenclador Reforsal, aplicando un descuento.
El resto de los servicios estará dirigido a pacientes con cobertura, cuyos costos serán asumidos por obras sociales o financiadores privados.
Derivaciones y acceso: Los procedimientos programados, como cirugías, estudios de imágenes o de laboratorio, requerirán derivación previa de un profesional del sector público. En tanto, las atenciones espontáneas no necesitarán derivación y no se podrá negar la atención a ningún paciente, independientemente de su cobertura.
Se pretende, según los funcionarios, un hospital de complejidad 1, es decir que tenga consultorios externos, que tenga demanda espontánea, y una miniguardia para atender 90 o 95% de las problemáticas.
El nosocomio comenzó a construirse en 2014, pero la obra no avanzó en los plazos previstos y finalmente el Gobierno provincial decidió rescindir el contrato con la empresa constructora, modificar el proyecto original y proponer la terminación de la primera fase del centro asistencial.
En la reunión de prensa se comentó que ya hay por lo menos tres empresas que prestan servicios en Mendoza que están interesadas en el proyecto, pero la idea es que más interesados consulten los pliegos.
Cornejo dejó en claro que el modelo de hospital público con gestión privada es un pilar fundamental del proyecto, con la promesa de que los vecinos de bajos ingresos del lugar de bajos ingresos del lugar tengan acceso a la salud. enfatizó.
Por su parte, el intendente Allasino celebró el anuncio del hospital al remarcar que “es un día de agradecimiento y alegría” y afirmó que “se presentarán los documentos para que los expertos puedan revisarlos, estudiarlos y hacer las consultas necesarias”.
Probablemente, los equipos municipales de pavimentación, que ahora están reasfaltando la vecina calle Quintana, se hagan cargo de la pavimentación de la lateral oeste, actualmente de tierra, que permite el acceso a la unidad médica. Un problema menor en medio de las muchas complejidades de ejecución de obra y gestión del servicio que se avecinan.
Asimismo, está pendiente de definición qué nombre llevará el complejo médico asistencial.
