Sin asistencia médica, una embarazada parió a su bebé el sábado en la vereda de una calle en Cipolletti, Río Negro. Tras el nacimiento, la mujer y su esposo fueron asistidos por un hombre que los vio y los llevó hasta la salita de donde les habían dicho que era una “falsa alarma”. El bebé y su mamá están fuera de peligro.
Rosa Casandra y Cristian Cruz se dirigieron a la salita del barrio Las Perlas de Cipolletti, que quedaba a 15 cuadras de su casa. Al no poseer vehículo se dirigieron al centro médico caminando. Al llegar los recibió una enfermera que les dijo que se trataba de una “falsa alarma” y le aseguró a Rosa que “no estaba preparada para realizar un parto, aún”, contó Karina Espínola, tía de Cristian, a TN.
Según detalló Karina, su sobrino le insistió a la enfermera que la revisen a su esposa, ya que veía que “la pancita de ella estaba para abajo”. Sin embargo, no la atendieron y no les quedó remedio que volver a su casa a pie.
“A tres o cuatro cuadras de la salita, rompió bolsa y aguantó caminando varias cuadras más. Querían llegar a la casa, pero les faltaban como tres cuadras. Hicieron una más y ella se desvaneció, se le aflojaron las piernas” relató la tía.
La pareja quedó sentada en la vereda de la calle a punto de tener su hijo allí. Cristian ayudó a la mamá de su hijo en lo que pudo y esperó las indicaciones de ella, pero segundos después le dijo que el bebé estaba por salir.
“El bebé estaba resbalando y no pudo agarrarlo justo a tiempo. Llegó a tocar la tierra porque con el líquido que había estaba muy resbaladizo”, detalló Karina sobre el tenso momento. Cristian cubrió a su hijo con su remera y lo dejó en brazos de Rosa para ir a buscar auxilio a la casa de su tía que vivía a una cuadra.
Karina cuenta que cuando llegó los vio tirados en el suelo con el bebé en los brazos de la mamá, “Me decía ´mi bebé se muere, tengo miedo´. Era muy angustiante y desesperante la situación. Traté de buscar a alguien, pero la calle estaba vacía”.
Minutos más tardes un joven pasó con su camioneta por el lugar pero no frenó. Al rato volvió a observar que estaba pasando y acudió en su ayuda para llevarlos nuevamente a la salita. La mujer contó que el hombre les dijo que pensó que había sido un accidente, pero al no ver ningún auto dio la vuelta y los ayudó.
Karina fue quien decidió hacer público el caso en las redes sociales para que todo Cipolletti sepa lo que ocurre en la salita “Balsa” del barrio Las Perlas. La publicación recibió muchos comentarios de personas que denunciaron el mismo trato por parte de los médicos.
“No voy a permitir que esa gente siga ahí, porque no es solo mi sobrina. A muchísimas familias le hicieron daño, duermen todo el tiempo, te atienden cuando quieren y todo el tiempo están con el celular. En la puerta del lugar hay un libro de quejas con reclamos de abandono de persona” contó Karina.
Además, reveló que el pueblo lleva varios años luchando para que se haga un hospital porque a los vecinos de la zona los separan más de 45 minutos en colectivos hasta el centro de salud más cercano.
