Es muy común que nos quede un poco de jamón cocido en la heladera y que después de unos días se termine echando a perder. En esta oportunidad te vamos a enseñar un tip muy útil para congelar el jamón cocido o crudo y que no pierda su calidad.
El jamón tiene un alto contenido de humedad en relación a otras carnes, lo que significa que el jamón congelado usualmente está lleno de agua. Si bien esta agua puede retirarse normalmente, el agua en el jamón puede ser signo de una infección bacteriana o de un almacenamiento inadecuado.
Existen diferentes trucos para disminuir las probabilidades de que el jamón congelado se llene de agua. Es importante que tengamos en cuenta, que será seguro congelar jamón cocido siempre y cuando no haya sido congelado antes. Para que no pierdan sus características lo único que necesitamos es:
- Un tupper
- Láminas de plástico
- Jamón cocido/crudo
Cómo congelar jamón: paso a paso
Para congelar estos embutidos sólo tenemos que colocar en un tupper una feta de jamón crudo o cocido y luego un separador plástico. Repetir esto hasta que completemos el recipiente.
Cuando se quiera consumir nuevamente, sacamos el recipiente del freezer, retiramos la lámina de plástico y colocamos el embutido en un plato.
Es importante que el jamón se descongele a la intemperie o temperatura ambiente, no en el microondas.
Luego de 15 minutos, ese embutido tendrá las mismas cualidades o características como si no lo hubiéramos pasado por el freezer.