Según el Mapa Nacional de la Discriminación del Inadi, 7 de cada 10 personas sufrieron situaciones de discriminación en algún momento de su vida.
El relevamiento presentado este martes en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada, actualiza datos después de 6 años (2013-2019).
Dicho mapa también reveló que el racismo estructural es uno de los principales tipos de discriminación sufrida por los argentinos.
Esta tercera edición se elaboró a través de encuestas realizadas a 11.700 personas en sus hogares durante 2019; la situación dada por la pandemia Covid-19 impidió la finalización del trabajo de campo en algunas provincias.
Por lo tanto, hay que destacar que esta información no es representativa a nivel país pero sí resulta confiable analizarla en las zonas recolectadas.
Entre los puntos más salientes del relevamiento, el organismo identificó que:
- El 72% (más de 7 de cada 10) de la población sufrió situaciones de discriminación a lo largo de su vida, mientras que en la anterior edición, en 2013, representaban el 65%.
- Mientras que en 2013 solo un 12% de la población consideraba a la discriminación como una vulneración de derechos, en 2019 la cifra trepó al 36%, lo que da cuenta de un aumento en la incorporación de “la mirada de la discriminación como una negación de un derecho”.
- Más del 80% de los jóvenes de entre 18 a 29 años aseguró haber padecido estas situaciones y un 53% de quienes tienen de 60 a 74 años dijo haber vivido algún tipo de hecho discriminatorio.
- Los principales ámbitos en los que las personas experimentaron discriminación son el educativo, con el 41%; el laboral, con el 26%; y en la vía pública con el 18%.
- El racismo estructural es uno de los principales tipos de discriminación sufrida por los argentinos con un 40%, seguido por las corporalidades diversas, con un 38%, la ideología y el género.
- La “situación de pobreza” es el principal motivo discriminatorio en las provincias de Chaco, Salta, Santiago del Estero y Tucumán.
- La dimensión de género, en esta nueva edición del estudio, se incrementó al 12% de las experiencias sufridas a nivel general y 21% si solo se consideran las respuestas de las mujeres encuestadas.
- La identificación de las redes sociales como espacios de ámbitos discriminatorios creció “notoriamente”, lo que alerta sobre lo que la población consideró “un entorno hostil donde circulan discursos de odio, noticias falsas y una suerte de cultura del odio (haters)”.
- Frente a estas discriminaciones, las personas encuestadas consideraron que el Estado debe accionar, principalmente, incorporando el tema en las escuelas y realizando más campañas de difusión, y en menor medida dictando nuevas leyes que penalicen la discriminación, aplicando multas y/o sanciones y ampliando las instituciones donde denunciar.