Si Semana Santa suele ser, de por sí, un fin de semana XXL -ya que incluye el jueves y viernes como feriados para anexar al sábado y domingo-, en 2024 y en Argentina el finde será XXXXL. No es una exageración, sino que al Jueves y Viernes Santo -28 y 29 de marzo- hay que sumarle, además, el lunes 1 y el martes 2 de abril. El martes se conmemora el Día del Veterano y del Caído en Guerra de Malvinas, mientras que el 1 se decretó feriado puente con fines turísticos y, justamente, para lograr esta especie de oasis de descanso en plena etapa laboral.
Como sea, el último fin de semana de marzo y los primeros días de abril contará con un receso de 6 días -en el mejor de los casos- o de 5 días -en caso de quienes trabajen el Jueves Santo, ya que no se considera feriado, sino “día no laborable”-. Y, si la billetera lo permite, es una imperdible oportunidad para una escapadita que permita hacer un paréntesis en la rutinaria vida cotidiana.
Con este panorama por delante, las tranquilas y casi escondidas Termas de Balde (San Luis) se convierten en una alternativa por demás atractiva para que este descanso de 6 días se convierta verdaderamente en un plan relajante.
PROPIEDADES Y BENEFICIOS DE LAS AGUAS TERMALES
Balde es un pequeño pueblo de la provincia de San Luis, caracterizado por su tranquilidad y armonía, ubicado a la vera de la ruta 7, a apenas 234 kilómetros de la Ciudad de Mendoza y muy cerca del límite entre ambas provincias. En auto, completar el tramo toma menos de 3 horas y es una alternativa relativamente gasolera y distinta para disfrutar del receso de Semana Santa y los feriados de abril que, extrañamente, convierten al fin de semana en más extenso que a las dos semanas hábiles que lo rodean.
Los elementos más distintivos de Balde son su quietud, su silencio, sus paisajes naturales y -principalmente- sus aguas termales. Esta localidad es parte de la región de Termas y Salinas, que predominan en el sudoeste de San Luis y que se convierte en un importante imán para visitantes de todo el país (y del extranjero también). En la zona, además, sobresalen las Salinas del Bebedero (a menos de 20 kilómetros de Balde).
Como muchos de los pueblos en esa zona, Balde -en sus orígenes- nació en torno a la estación ferroviaria que da nombre al lugar. No obstante, cuando el tren dejó de circular regularmente por la zona, quedó un tanto aislado de la metrópolis. Sin embargo, su status de pueblo tranquilo lo mantiene, y su principal atractivo -las aguas termales- se mantiene más vigente que nunca.
Dentro del circuito de lo que se conoce como “Turismo Salud”, Balde cuenta con dos complejos termales -uno privado y uno municipal-, y los dos están acondicionados y preparados para recibir a los visitantes. Las comodidades y servicios están al orden del día, y las propiedades energéticas y terapéuticas del agua son lo que más cautiva y atrapa a sus visitantes.
No solo desde el punto de vista de la relajación, sino también para aliviar y calmar algunas dolencias corporales, musculares y óseas. Estas son una de las principales características de las aguas termales.
- Estimulan funciones hepáticas, y actúan sobre el riñón.
- Desconstracturante muscular.
- Mata gérmenes y virus.
- Aumenta la circulación sanguínea.
- Activa el metabolismo, los sistemas enzimáticos y hormonales.
- Ayuda a eliminar toxinas del cuerpo.
- Produce endorfinas.
- Tiene virtudes exfoliantes, antisépticas y astringentes.
A la salida del pozo, la temperatura del agua es de 43°. Además, esa temperatura sumada a la composición química del agua la convierten en aguas especiales, alcalinas, sulfatadas, cloruradas, bicarbonatadas y mineralizadas.
El agua bebible, en tanto, permite la incorporación de minerales como sodio, potasio, calcio, magnesio, flúor. Las aguas para inmersión facilitan los movimientos articulares y musculares, mientras que la temperatura actúa como descontracturante muscular y vasodilatador que aumenta el flujo sanguíneo. Los poros, por su parte, se dilatan y los minerales son absorbidos por la piel y pasan al tejido subcutáneo, desde donde activan el metabolismo, los sistemas enzimáticos y hormonales.
Es un agua ideal para ayudar a personas con reumatismo crónico, diabetes y en enfermedades de la piel. Además, en el lugar hay complejos turísticos y hoteles que ofrecen servicios de tratamientos especiales para el cutis y la piel con máscaras de barro, masajes y otras particularidades. Todo este combo convierte al lugar en un sitio perfecto para descontracturarse, física, psicológica y espiritualmente.
QUÉ VISITAR EN BALDE Y CUÁNTO CUESTA ALOJARSE
Alojarse en el Hotel Termas de Balde tiene un valor de 59.000 pesos por noche (actualizado a la Semana Santa 2024), en habitación doble (2 personas), con desayuno completo (infusiones calientes, jugo de naranja, panificados dulces y salados), servicio de mucama, ropa blanca, baño privado con agua termal (43°), televisión satelital y aire acondicionado.
Además, el hotel cuenta con estacionamiento cubierto, restaurant con comidas caseras y masajes, con costo adicional.
También hay opciones en cabañas o complejos ubicados en las inmediaciones y que, en el caso de los más lujosos, ascienden a 140.000 pesos por noche para dos personas (los más económicos oscilan entre 40.000 y 60.000 pesos).
Centro Termal Municipal
Ubicado en el edificio de la antigua Hostería Provincial, inaugurada en 1942, tiene habitaciones con baños termales individuales y con la pileta al aire libre en Balneario Municipal.
El pozo termal está en funcionamiento desde 1938 y sus aguas emergen de una amplia meseta subterránea alcanzando la mencionada temperatura de 43º. Las aguas se pueden disfrutar durante todo el año.
Salinas del Bebedero
Es un salar ubicado a 42 kilómetros de la ciudad de San Luis, y a menos de 20 kilómetros de Balde. Se trata de un importante yacimiento de cloruro de sodio que, con su apariencia de enorme desierto blanco, es todo un paisaje y una atracción para los visitantes.
En invierno, las salinas lucen todo su esplendor, llegando a cubrir 5 kilómetros de ancho y unos 15 kilómetros de largo, con un metro de sal acumulado sobre la superficie.
Las montañas, los médanos y los amontonamientos de sal convierten al recorrido en algo majestuoso e inevitable si uno llega al lugar. Además, en las Salinas del Bebedero se encuentra una planta de procesamiento donde se produce sal comestible.
Para llegar hay que tomar la Ruta Provincial 15 hacia el sureste.
DÓNDE QUEDAN LAS TERMAS DE BALDE, UBICADAS A SOLO 3 HORAS DE MENDOZA
Para llegar desde Mendoza hasta Balde (San Luis) hay que tomar por la Ruta 7 hacia el este, con destino precisamente a la provincia puntana. Siempre por la ruta 7 hacia el este, hay que andar 234 kilómetros hasta llegar a la entrada a Balde (ubicada sobre el margen norte de la ruta).
Del arco de Desaguadero, límite interprovincial entre San Luis y Mendoza, Balde se ubica a solo 55 kilómetros. Y la ciudad de San Luis está a solo 34 kilómetros.