El devastador incendio en el Cerro Champaquí, que ya consumió 3.500 hectáreas, continúa ardiendo por cuarto día consecutivo. Ante esta situación crítica, más de 200 bomberos fueron desplegados en la zona, transportados en helicópteros para facilitar su acceso a las áreas más afectadas.
Este miércoles, el Gobierno de la Provincia de Córdoba anunció la incorporación de un centenar de brigadistas adicionales, elevando el total de efectivos a 275. Además, se sumaron tres aviones y dos helicópteros para colaborar en las labores de extinción del fuego.
El vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil advirtió sobre las complicaciones que presentan los fuertes vientos en la zona: “Hoy sumaremos más bomberos y más recursos para poder contrarrestar los fuertes vientos que van a complicar aún más las tareas”. La rotación del viento norte, persistente durante la noche del martes, dificultó considerablemente las labores de extinción.
Según medios locales, el incendio se originó en el valle de Traslasierra el domingo pasado y rápidamente se trasladó al valle de Calamuchita, atravesando las cimas de las Sierras Grandes. Los bomberos se distribuyeron en ambas áreas para combatir el fuego de manera más efectiva.
La Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil de la Provincia informó que, por el momento, el foco de incendio no representa un riesgo inmediato para las viviendas cercanas. Sin embargo, la topografía y la altura del foco complican las operaciones. Este incendio lo catalogaron como uno de los más grandes de Córdoba.
En respuesta a la emergencia, Greenpeace lanzó una campaña para recaudar fondos destinados a los recursos necesarios para enfrentar la crisis actual. La organización hace un llamado a la comunidad para colaborar en la protección de los humedales quemados.
El incendio sigue activo, avanzando hasta las cimas más altas de las Sierras Grandes y extendiéndose hacia el valle de Calamuchita, sin haber sido aún controlado. Según Fabián Vargas, coordinador de la Regional 7 de Bomberos Voluntarios, la mayor parte del área afectada está compuesta por pasturas naturales de altura. El impacto ambiental afecta tanto al área hídrica sobre los suelos y sobre la fauna.