El terrible episodio protagonizado por Gabriela Desirée Rodríguez, la paciente más grave luego del episodio sufrido el domingo a la salida del Teatro Plaza, en Godoy Cruz, despertó en toda la provincia de Mendoza innumerables muestras de solidaridad y numerosos grupos de oración por su salud.
Así lo indicó, en diálogo con Los Andes, el sacerdote de la Parroquia Castelmonte de Godoy Cruz, donde resultan incesantes los rezos de los fieles de la pequeña capilla instalada en el lugar, que funciona las 24 horas.
De acuerdo con el último parte médico, la joven, de 27 años, hija única, oriunda de Godoy Cruz, continúa con pronóstico reservado en Terapia Intensiva del Hospital Central.
“La paciente está sedada, con asistencia respiratoria, control hemodinámico, neuromonitoreo y control evolutivo por equipo multidisciplinario”, indica el informe.
“Desde que ocurrió el hecho al día de hoy pasaron más de 250 personas a orar”, indicó el padre Daniel, quien está a cargo de la parroquia situada en Perito Moreno 1361 de Godoy Cruz, a pocas cuadras del domicilio de la familia.
También desde el lunes posterior a la tragedia en cada misa oficiada en ese mismo templo donde suele acudir la familia se piden intenciones por su salud y la fortaleza de sus padres.
Los grupos de whatsapp dedicados a las oraciones también están a la orden del día. Lo mismo sucede en Facebook, donde una de las más populares publicaciones señala: “Desirée es muy jovencita y junto con sus padres es adoradora del Santísimo en la Parroquia de Castelmonte, de Godoy Cruz.. Tiene una hemorragia cerebral. Por favor si pueden poner el pedido en otros grupos de oración se agradecerá”. “Que sigas disfrutando de tu hermosa vida”, pidió María Ester, entre la inmensa cantidad de vecinos que rezan por la chica, mientras que Anita, otra mendocina, publicó: “Señor, sánala”.
A excepción de los informes médicos, dos veces al día, desde el Hospital Central el hermetismo es casi total, aunque trascendió que amigos y familiares velan por su salud en la sala de espera de Terapia. En las últimas horas, una tía de nombre Alicia y el padre de la paciente aguardaban el parte médico junto a amigos y compañeros de la chica, aunque prefirieron no formular declaraciones hasta tanto se produzca una evolución en su estado.