Mareos, mal sueño, dolores en el cuerpo y, sobre todo, el arrepentimiento por haber tomado de más, son algunas de las consecuencias de la resaca. Pero tranquilos: a todos nos ha pasado y todos hemos probado diferentes métodos para recuperarse lo más rápido posible.
Algunos son más efectivos que otros y, casi sin saberlo, los hacemos normalmente, como una buena ducha o dormir largo y tendido. Otros, aunque no parezcan, son contraproducentes, como el tan popular tomar un café o comer alimentos grasos.
Generalmente, lo primero que hacemos es recurrir a tomar un analgésico o algo que acelere el proceso de recuperación, lo que no siempre es posible. Sin embargo, hay varias cosas que podés hacer en tu casa y que son igual de efectivas, y por eso he aquí los tips anti-resaca:
- Beber agua: la ingesta de alcohol deshidrata, y lo que nuestro cuerpo necesita al día siguiente es una dosis extra de hidratación. Por eso, hay que tomar agua apenas te despiertes y seguir haciéndolo todo el día. También pueden ser infusiones, preferiblemente sin azúcar.
- Tomar bebidas isotónicas: así como son útiles cuando tenemos dolor de panza, las bebidas isotónicas suponen una cuota de minerales para nuestro cuerpo, por lo que son un buen complemento al agua. Tu cuerpo necesita recuperar el equilibrio y cualquier ayuda es buena.
- Dormir mucho: mientras más descanso, mejor. Eso ayudará al cuerpo a recuperarse, mejorando tu humor y tu aspecto físico, y ayudándote a rendir más y a prevenir enfermedades.
- Un extra de vitamica C: tomar alimentos ricos en vitamina C, como naranja y kiwi, ayudará a nuestro cuerpo a recuperarse más rápido de la resaca, ya que tiene propiedades antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres que se liberan cuando nuestro organismo “se está desintoxicando”. Además, ayuda al hígado a metabolizar el alcohol, así que lo eliminaremos antes.
- Aportes de vitamina B12: te ayudará a eliminar más rápidamente el alcohol de tu cuerpo a través de la orina. Puede encontrarse en alimentos como huevos, lácteos, carne o pescado.
- Evitar las comidas rápidas: es importante no caer en la tentación de comer pizza, hamburguesa, papas fritas u otros alimentos ricos en grasas. En cambio, elegí un menú más saludable que incluya verduras, huevos, lácteos, pasta o fruta. Esto te ayudará más a recuperarte gracias a sus vitaminas y minerales.
- Hacer deportes con moderación: al contrario de lo que muchos piensan, hacer actividad física post-borrachera puede ser positivo. Eso sí, solo con moderación y sin grandes exigencias, ya que el objetivo será activar el cuerpo. Cuando veas que ya empiezas a recuperarte, podés intenetar con una caminata, yoga, pilates o estiramiento.
- Una buena ducha: este sí es un clásico. Una buena ducha de agua tibia conseguirá aliviar la resaca y te hará sentir despejado, más limpio y, además, el vapor que se desprende te ayudará a mitigar un poco el dolor de cabeza.
- Evitar el café: el café es diurético y lo único que hará es deshidratarte aún más. Por otro lado, es un estimulante gástrico, así que en lugar de “asentar” tu estómago, hará que te sientas removido. Si querés tomar una bebida caliente, mejor ir por el té o un caldo de verduras.
- Analgésico, la última elección: si ninguno de los remedios anteriores te funciona, siempre podés recurrir a un antiinflamatorio para acabar con el dolor de cabeza, como un ibuprofeno. Por el contrario, evita el paracetamol, ya que hará que tu hígado trabaje más y, en días de resaca, éste ya está haciendo un esfuerzo extra para eliminar las toxinas del cuerpo, por lo que mejor no saturarlo.
- La próximo vez: lo más importante y el mejor truco es, siempre, practicar la moderación. Ni cambiar el orden de las bebidas ni ningún otro truco evitará la resaca, por lo que controlarse un poco más siempre será el mejor tip anti-resaca.