Desde hace ya unos meses que en Estados Unidos estalló el turismo de vacunas y muchos argentinos eligieron como destino Miami. Tanto así, que las empresas de turismo vieron la veta de resurgir por ese lado y la aerolíneas también aprovecharon la movida para poner cifras exorbitantes a los pasajes que llegaron a salir hasta 400 mil pesos por un viaje en avión. Muchos lo pagaron con tal de recibir las dosis que los inmunizaran contra el coronavirus. Y también para poder elegir qué vacuna aplicarse.
Pero hay un primer problema, que las vacunas Sputnik V no están en Norteamérica. Y el otro problema puntual, es que desde Rusia, su país de origen, no están enviando las segundas dosis y hay alrededor de 6 millones argentinos esperando a ser inoculados con la misma.
En Argentina hay demoras y muchos problemas para conseguir el segundo componente de la Sputnik V, por eso se está evaluando la posibilidad de combinarla con vacunas de otros laboratorios. Y es que además, sin la segunda dosis aplicada, la primera no alcanza para lograr la inmunidad.
Nueva estrategia
A raíz de toda esta problemática es que la empresa de turismo Travel Mark lanzó un paquete para ir a Rusia a vacunarse.
“Conseguimos que una clínica de San Petersburgo nos ofrezca vacunas. Ya sean las dos dosis o la segunda para los extranjeros”, explicó Mario Ijelman, titular de la agencia argentina.
La compañía anunció, a través de sus redes sociales, que tienen para ofrecer un paquete de 10 días y 9 noches para viajar a Moscú y San Petersburgo.
La propuesta reza que una vez que los turistas llegan a la capital rusa se quedan durante 4 días. Luego harían visitas por la ciudad, incluyendo el Kremlin y un paseo en subte, para después viajar a conocer San Petersburgo en un tren de alta velocidad.
Y finalmente, al día siguiente se vacunan. Para ellos es imprescindible que los argentinos ya vacunados lleven el certificado de la primera dosis.
“Los viajeros van a la clínica con turno, acompañados por nuestro guía de habla hispana. Los espera por si tienen alguna reacción adversa, igual que acá. Pero allá la vacuna no es gratis, aunque tiene un precio poco significativo que está incluido en el paquete. Ese día y el siguiente los tienen libres porque prevemos que pueden llegar a necesitar reposo”, detalló Ijelman.
En las jornadas que restan se hace un city tour, se visita el Hermitage y la basílica de San Pedro, entre otros famosos atractivos de la ciudad rusa.
“El último día vuelven a la clínica para hacerse el PCR. Lo hacemos a último momento por si los vuelos sufren alguna demora y para que les sirva para entrar a Buenos Aires”, señaló el titular de la agencia.
Los precios
La propuesta es de 1.120 euros, es decir 1.336 dólares. La tarifa es por persona para que viajen en grupos de seis, con habitaciones dobles y no incluye aéreos.
Pero sí contempla alojamiento en hoteles 4 estrellas con desayuno, traslados, excursiones privadas con guía en español y pasaje en el tren Sapsan en clase económica.
Aunque los argentinos no figuran en la lista de extranjeros a los que Rusia les habilitó el ingreso, de igual modo la empresa explica que hay una excepción e indica cómo es el proceso para entrar con el objetivo de obtener la vacuna.
“Los argentinos tienen permiso de entrada si van a atenderse a un clínica como es en este caso. Nosotros mandamos todos los datos de las personas que se van a vacunar y ellos nos hacen el trámite y nos mandan la carta de invitación del consulado. Con eso, tienen la autorización de ingreso. Los viajeros tienen que tener pasaporte argentino vigente y no se necesita visa”, aseguró.
El vuelo se hace a través de aerolíneas como KLM, Lufthansa y Air France, con conexiones que, aclaran en la agencia, no superan las 24 horas.
El titular de la agencia remarcó: “En este momento hay gente que viajó con nosotros. Se vacunaron antes de ayer con la segunda dosis y hoy están paseando por San Petersburgo. En una semana regresan”.
