Las cruzadas de la fundación Pro Montaña tienen su origen a principios de los años 90 a partir de la inquietud que generaba en un grupo de defensores del medio ambiente el maltrato a la naturaleza dejando marcas en la cordillera y precordillera. Con el fin de revertir los daños causados en estos sectores su socio fundador y actual presidente, Claudio Mellimaci comenzó con trabajos de limpieza y recolección en los senderos de enduro, aledaños a la ruta provincial 13.
La iniciativa fue creciendo sin prisa ni pausa, contribuyendo siempre a la ecología y el bienestar de quienes residen en Mendoza y también de sus visitantes, montañistas y amantes de la naturaleza. En esta oportunidad el grupo está por emprender una tarea loable relacionada con la contaminación visual en la ruta internacional 7 a unos 15 kilómetros de la villa Uspallata.
“Viniendo hacia Mendoza hay dos muros contención de hormigón armado que da seguridad contra los derrumbes de la montaña. Uno de ellos está vandalizado con grafitis callejeros. El otro con una gran publicidad de una campaña política de un postulante de un gremio. Claramente las dos pintadas producen contaminación visual. Sin embargo la segunda deliberadamente hace campaña política”, indicó.
“Creemos que esta metodología de proselitismo debe ser erradicada de una vez y para siempre, y que sus actores de alguna manera social o económicamente deben recibir una condena”, puntualizó.
En cuanto al Cerro Arco, Mellimaci explicó que con el apoyo de la secretaría de Medio Ambiente se están concretando los trabajos de remoción de pintadas vandálicas. “El pasado lunes 22 de enero comenzamos estas tareas con la remoción de 20 pintadas. Nos quedan aproximadamente cinco intervenciones más para que el cerro vuelva a lucir como la creación lo hizo”, reflexionó.
En general, dijo, el cerro presenta buena higiene salvo alguna botella o papeles arrojados. Refiriéndose al torreón del parque General San Martín, una reliquia oculta muy valiosa en historia, dijo que el pequeño monumento es víctima de una vandalización absoluta.
“Se trata de la maqueta que realizó la empresa constructora que erigió la penitenciaría San Felipe para mostrar por aquellos años al gobierno de Mendoza el tipo de encastre de piedras y terminación que tendría el penal”, indicó, para agregar que en conjunto con el director de Parques, arquitecto Ricardo Mariotti, se le dará vida y un atractivo más al paseo.
“En la villa de Uspallata encontramos un basural a cielo abierto en la unión de ruta provincial 13 y la villa. De hecho, pescamos in fraganti a una camioneta de una importante empresa privada arrojando 10 bolsas de consorcio llenas de basura”, relató.
“Es la punta del ovillo de una serie de irregularidades a lo largo del corredor internacional que se encuentra totalmente vandalizado por pintadas, incluida una gran publicidad política de un gremio que impunemente usa para su rédito”, opinó.
La ruta 52 conecta la ciudad de Las Heras pasando por la reserva natural de Villavicencio, Cruz de Paramillos para desembocar en la villa de Uspallata.
“A lo largo de la ruta llegando a la reserva comienza la vandalización con grafittis. A mitad de camino encontramos un ícono histórico también que fue el pequeño edificio del primer telégrafo. También destruido y roto. A éste último dedicaremos un capítulo especial por ser parte de nuestra historia mendocina. Por último, al final de camino daremos limpieza y puesta en valor a la piedra energética a orillas del Tunduqueral”, concluyó.
Los inicios
Cuando la fundación se inició, hizo una primera intervención de pintadas aplicando, por primera vez, el método de arenado con aire comprimido. Por situarse muchas de estas pintadas en lugares inaccesibles para ser removidos con maquinarias, los miembros comenzaron a investigar la posibilidad de aplicar un nuevo sistema con gel removedor y cepillado manual.
Durante el procedimiento, Fundación Pro Montaña limpió los senderos, intervino las pintadas vandálicas y concluyó su tarea con la colocación de cartelería para crear conciencia de limpieza y de no violencia ambiental.
“En este proceso de creación de conciencia surgen otros proyectos concatenados de alto contenido social, protección y prevención del cuidado del medio ambiente y las personas”, adelantó el presidente, para señalar que la Fundación se encuentra trabajando en la materialización de la figura del preventor ambiental y la implementación de una ley que exija al ciudadano estos conocimientos.
Fundación Pro Montaña elabora proyectos en relación a prevención de la salud de nuestro medio ambiente. De esa iniciativa surge la creación de la figura mencionada que trabaja ad honorem y es capacitado por la fundación y está dedicado a documentar acciones y hechos relacionados con la violencia ambiental.
Además, esta organización toma como premisa la descompresión de las autoridades sin eximirse de sus responsabilidades, ni extralimitarse en sus funciones.
De este modo, analiza y filtra, a través de un equipo de trabajo, las denuncias de violencia ambiental radicadas por el preventor ambiental, para luego elevarlas al Ministerio Público Fiscal. Recientemente, Fundación Pro Montaña eligió el departamento de Luján de Cuyo para intervenir los vastos espacios de montaña que posee y algunos sectores públicos de relevancia que “lastimosamente”, según señalaron, se encontraban pintados.