Más de 60 muertos y decenas de desaparecidos son las consecuencias de la catastrófica DANA en Valencia (España), que derivó en escenas apocalípticas, inundaciones y desbordes de ríos y canales en esta región.
Hasta el momento, según los registros oficiales, son 64 los muertos como consecuencia del fenómeno de “Depresión Aislada en Niveles Altos” (de allí el acrónimo DANA), un fenómeno meteorológico que se produce cuando una masa de aire frío se aísla en la atmósfera y crea una potente inestabilidad. Ello suele derivar en la formación de nubes convectivas y provocar lluvias intensas, tormentas eléctricas y, en algunos casos, también granizo.
La DANA de Valencia es la peor en el último siglo y han llovido más de 400 litros por metro cuadrado, de acuerdo a la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
“Salí de mi casa ayer a la noche y nunca pudimos volver”, resume el mendocino Hugo Mancini (43) a Los Andes.
Si bien ahora se encuentra “refugiado” en la casa de unos familiares en la zona céntrica de Valencia (donde las consecuencias del fenómeno meteorológico casi ni se sienten), la casa de Hugo y de su esposa se encuentra en Aldaia, una de las regiones más castigadas por las lluvias e inundaciones en las últimas horas.
“Salí de casa para ir a buscar a mi esposa al trabajo y nunca más pudimos volver”, agrega el mendocino, quien hace un año y medio llegó a Valencia y trabaja actualmente en el área de logística de la conocida cadena de supermercados Mercadona.
“El lunes a la noche empezó la llovizna, mientras que ayer -martes-, muy temprano, empezó a llover ya con más intensidad. Nos sorprendió que la gente de lo que sería Defensa Civil tardara más de 6 horas en mandar la alerta de prevención para no transitar”, repasa Hugo.
“Anoche, cuando sonó la alarma, ya teníamos el agua a la altura de la cintura. Hay un mall muy conocido en la zona y se abrieron las salas del cine para que quienes trabajaban y estaba ahí se resguardaran”, describe Mancini.
LA PEOR CATÁSTROFE DEL SIGLO
Los pueblos de Aldaia, Alaquàs, Torrent y Xirivella -al oeste de Valencia- son las zonas más afectadas por las inundaciones. La crecida de los ríos y canales de la zona ha llevado a que las calles se conviertan en cauces furiosos de agua, de esos que arrastran con los autos, personas y todo a su paso.
De hecho, todas esas zonas han quedado sin luz e incomunicadas.
“Hay mucha gente de Mendoza y de Argentina viviendo acá. Y muchos de ellos han quedado incomunicados, por lo que ni siquiera han podido avisarle a su familia cómo están”, destaca Hugo Mancini.
A las 20 del martes (hora española, 16 en Argentina), Hugo salió de su casa en Aldaia para ir a buscar a su esposa al centro de Valencia (donde trabaja). A las 20:30, la calle de su vecindario estaba inundada, intransitable y con un río de autos apilados en la calle -y que habían sido arrastrados por el agua-.
En los más de 15 pueblos valencianos ubicados en el sitio más castigado por la DANA no hay luz ni agua, mientras que las clases y la actividad laboral están suspendidas hasta nuevo aviso.
YA DEJÓ DE LLOVER EN VALENCIA
Si bien Hugo lleva solo un año y medio en esa ciudad, su esposa está instalada desde hace 8 años. Y los lugareños no dudan en repetir una y otra vez que ha sido la peor tormenta e inundación del último siglo. “Nos contaron que hubo una fuerte en 1998, pero que no se compara con esta porque no hubo muertos”, agrega Hugo Mancini.
En las últimas horas dejó de llover y todo pareciera indicar que la calma irá regresando de a poco. Sin embargo, en medio de la psicosis, la situación está lejos de normalizarse.
“Ahora están diciendo que hay una represa que se rompió. Y que, si bien está controlada, podría seguir saliendo y llegando agua”, sostiene Hugo.
“No puedo volver a mi casa desde hace 24 horas. Estoy con un par de ojotas y un pantalón corto, y hemos dejado a nuestros 3 gatos solos allá”, concluye el mendocino.