“Esto puede pasarle a cualquiera, no siempre ocurre con desconocidos ni con citas Tinder”. Este tuit fue de parte del barman de Verne, uno de los tantos bares de la noche porteña. Fue una noche atípica, acababa de ver cómo deslizaban una droga en la bebida de una chica. Asustado, recurrió a las redes para relatar la situación.
El hecho sucedió en la barra de Verne, un bar clásico del circuito de tragos de Palermo, en Buenos Aires. Es de los más elegidos por su combinación entre la coctelería de autor con un clima distendido.
Inspirado en la literatura de Julio Verne, comenzando por la ambientación hasta la carta, todo tiene detalles que hacen recordar al reconocido autor de La vuelta al mundo en ochenta días, entre muchos otros. Hasta los nombres de varios tragos recuerdan algunas de las ciudades que recorre el libro.
“No nos gusta contar lo que pasa en el bar pero creo que esta vez necesitamos contarlo”, comenzó el tuit para desandar la historia peligrosa con suerte.
“Una persona llega solo y pide una botella de espumoso con dos copas. Visiblemente estaba esperando a alguien. Le acercamos las 2 copas y la botella. No las servimos ya que la persona esperaba a alguien. Cuando el personal del bar se aleja el cliente sirve ambas copas”, revelaron. Hasta ese momento, una situación tradicional, algo que sucede a diario.
No obstante, en un momento ven que el cliente hace un movimiento extraño. “Luego saca algo de su bolsillo (no logramos ver qué era, una especie de pastilla) y la pone en la copa de la otra persona, a la que estaba esperando. El equipo del bar vio esta situación. Al mismo tiempo llega su cita y se sienta con él. Sin dudarlo decidimos ir a hablar con ella y advertirle”, contaron.
“Por suerte cuando ella llegó, él se levantó para ir al baño. En ese instante nos acercamos y le preguntamos a ella si se conocían hace mucho y pasamos a describirle la situación que vimos y le propusimos ayudarla para lo que necesite”, agregaron.
Una vez que volvió del baño, el hombre habló con ella, pidieron la cuenta y se fueron juntos. Sin embargo, la chica no tocó el vaso. “Ella nos dijo que se conocían hace tiempo y que hablaría con el hombre del tema”, revelaron desde el bar.
“Esta es la copa de ella que recuperamos. Se ve claramente el polvo rosa en el fondo”, narraron en un tuit, donde se puede ver un polvito extraño en el fondo del cóctel. Si bien la alerta no pasó a mayores, desde el bar buscaron poner el énfasis en la importancia de la prevención, tanto de parte de los clientes como de los barman durante su turno de servicio.
“Esto puede pasarle a cualquiera, no siempre ocurre con desconocidos ni con citas Tinder. Nosotros como gastronómicos debemos estar siempre atentos, no hacernos los boludos y actuar, siempre actuar”, concluyeron.
Abajo del viral tuit, otros usuarios comenzaron a felicitarlos por la intervención, “Excelente el accionar del bar ante un hecho de violencia de género”, comentó una de las usuarias. Otros usuarios comentaban situaciones similares que le habían sucedido.
“Viví una situación muy parecida trabajando en un bar acá en Rosario”, contó una bartender. “Cuídense mucho”, finalizó.
