“Ya estamos en condiciones de empezar con dosis de refuerzo en geriátricos y personal de salud”, afirmó la Ministra de Salud, Ana María Nadal. Si todo va como está planeado, la intención es comenzar los últimos días de noviembre para luego avanzar con mayor población objetivo.
“Implica reforzar la inmunidad en aquellos que ya hace más o menos un año o poco menos que iniciaron la vacunación”, subrayó. En efecto, el refuerzo apunta a fortalecer las defensas de quienes llevan más tiempo de iniciada la vacunación contra el Covid-19 en la provincia.
El 29 de diciembre de 2020 la esperada campaña de vacunación comenzó con el personal de salud más expuesto al virus por lo que a fin de mes llevarán cerca de un año desde la primera dosis y serán los priorizados en esta nueva etapa.
Según los planes, esperan a fines de noviembre comenzar a aplicarla de manera escalonada: primero al personal de salud, luego en geriátricos y luego a personas con más exposición y mayor riesgo.
En consonancia, hoy el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak anticipó que se dará una dosis de refuerzo al mismo grupo. Dijo que sería “a fin de año o principios del año que viene”.
El funcionario destacó que la decisión fue tomada en el marco del Consejo Federal de Salud. “El equipo de salud será el primer paso, como hicimos en la primera ola porque son los que más riesgo tienen. Y luego, durante el primer cuatrimestre del año próximo, el resto de los grupos etarios”, detalló a la prensa.
A comienzos de agosto comenzó a hablarse de esta nueva estrategia de campaña. La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, reconocía entonces que estaba en estudio. Países como Francia, Alemania o Chile ya habían avanzado al respecto.
“Las vacunas para enfermedades respiratorias no generan inmunidad para prevenir el 100% de la infección, y tampoco tienen una duración tan larga en el tiempo”, explicó la ministra en ese entonces y planteó que “a una población estratégica seguramente haga falta dar un refuerzo”.
En este plano juega un rol importante la aparición de nuevas variantes del coronavirus que tienen más poder de contagio y cierto escape inmune, como es el caso de delta que ya ha generado importantes brotes en países con alta tasa de vacunación. Lo que se persigue con la vacunación es evitar el desarrollo de casos de cuadros graves, internaciones -que saturen el sistema de salud- y muertes.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) señalan que las vacunas Covid siguen siendo efectivas, pero datos recientes sugieren que tienen menos efectividad para prevenir la infección o un cuadro más leve con síntomas a lo largo del tiempo. Aunque sin indicaciones específicas, en general lo que se está recomendando es aplicarla después de los seis meses de la última dosis ya que los estudios realizados han demostrado un aumento de la respuesta inmunitaria. ”Con una mayor respuesta inmunitaria, las personas deberían tener mayor protección contra el Covid, incluso contra la variante delta”, afirman los CDC.
Cabe señalar que desde hace meses se ha instalado la idea de que es probable que se implementen refuerzos periódicos de la vacuna contra el coronavirus, como se hace con la vacuna de la gripe.
