El gobierno estadounidense comunicó que a partir del 1 de noviembre exigirá a los extranjeros adultos estar vacunados contra el Covid-19 para ingresar a su país. Esto generó una gran incertidumbre surgiendo un sin fin de preguntas en todo el mundo.
Las dudas son mayores aún en la Argentina, donde más de 10,2 millones de personas han recibido la fórmula rusa, lo que le imposibilitaría el ingreso al país del norte.
Sputnik V no ha conseguido la aprobación de la Organización Mundial de la Salud, ni de ninguna de las agencias de medicamentos más importantes del mundo, como lo son la estadounidense FDA o la europea EMA. De hecho, en los países europeos hoy no se permite el ingreso de las personas inmunizadas con la vacuna rusa.
Desde que fue anunciada en 2020 por el gobierno de Vladimir Putin, la Sputnik V ha tenido cuestionamientos a nivel mundial en cuanto a la homologación del proceso de fabricación. Esta situación limita y genera inconvenientes a quienes a la hora de viajar tienen que presentar el “pasaporte de vacunación” de un fármaco con reputación cuestionada en algunos lugares del mundo.
El gobierno de Joe Biden, promovió desde el inicio de la campaña de vacunación la política del turismo de vacunas, donde se invitaba a las personas de todo el mundo a vacunarse gratuitamente una vez que pisaba suelo norteamericano. Sin embargo, esta nueva medida en su política sanitaria plantea un nuevo escenario para los visitantes internacionales lleno de preguntas, que en los próximos días responderían las autoridades gubernamentales estadounidenses.
Los interrogantes que se plantean son muchos: ¿serán admitidas las personas que se vacunaron sólo con Pfizer, Moderna o Johnson & Johnson (Janssen), las tres vacunas aprobadas por la FDA hasta ahora? ¿O podrán ingresar aquellas que tienen en sus brazos las vacunas aprobadas por la OMS como son Pfizer, Moderna, Janssen, Sinovac, Sinopharm, AstraZeneca y su gemela india, la vacuna Covishield? ¿Qué pasará con los millones de personas que tienen aplicadas las dos dosis de Sputnik V, como los más de 10 millones de argentinos? ¿Se admitirán a las personas que tienen combinación de vacunas? ¿Y si una de esas no integra la lista oficial de la FDA o la OMS?
Pero para poder contestarlas y terminar con la incertidumbre generada habrá que esperar a que en los próximos días las autoridades sanitarias estadounidenses den a conocer las restricciones sanitarias que se implementarán a partir de noviembre.
Frente a este contexto, muchos argentinos, que ya compraron pasajes y están vacunados con Sputnik, empezaron a revisar sus planes por temor a que no le permitan el ingreso. Incluso los rusos empezaron a viajar a otros países para vacunarse con Pfizer por la falta de reconocimiento del antídoto elaborado por el Instituto Gamaleya.
Por otra parte, desde la Casa Blanca se deslizó que podrán ingresar a Estados Unidos los extranjeros vacunados con dos dosis de la vacuna Oxford-AstraZeneca a partir del 1° de noviembre. Si bien no se trata de un anuncio oficial, Anthony Fauci, médico infectólogo y principal asesor del gobierno de Joe Biden, lo informó. Y expresó: “Queremos tener una política uniforme para todos los países y evitar la confusión o suposiciones de preferencia para algunos países”.
Tanto el gobierno, como la FDA y los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) todavía no se han pronunciado oficialmente sobre quiénes podrán viajar a EEUU. Consultada por la agencia Reuters sobre qué vacunas serán aceptadas para viajar, la vocera de los CDC Kristen Nordlund citó a la guía que rige al día de hoy: “Los CDC consideran a alguien completamente vacunado con cualquiera de las vacunas autorizadas por la FDA o cualquiera que hay autorizado la OMS”.
Por su parte, Thierry Breton, comisario de la Unión Europea para el Mercado Interior también dejó trascender que el panorama para los vacunados con AstraZeneca es bueno. Si bien la nueva normativa de Biden incluye a las vacunas reconocidas por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA), luego de visitar Washington, Breton celebró la apertura de las fronteras estadounidenses, y expresó en redes sociales “¡Es un hecho! Estados Unidos anunció hoy el levantamiento de la prohibición de viajar a los europeos completamente vacunados. Las intensas negociaciones han dado sus frutos”.
Por el momento se sabe, que a partir del 1° de noviembre los viajeros extranjeros que vuelen a Estados Unidos con una visa de visitante, ya sea de turista o de trabajo entre otras, deberán presentar una prueba de vacunación antes de abordar, además de un test negativo de COVID-19 realizado dentro de los tres días previos al vuelo. Los visitantes vacunados no deberán realizar cuarentena tras arribar al país. Las aerolíneas deberán recopilar información de los viajeros internacionales para facilitar el rastreo de contactos. Todas estas normativas se aplican para los viajes aéreos, no los terrestres.
Estas flexibilizaciones en las restricciones de viaje incluyen a 33 países, entre los cuales se encuentran China, India, Brasil, Irán, Sudáfrica y la mayor parte de Europa, siempre para viajeros completamente vacunados. En la actualidad, la mayoría de los extranjeros que hayan estado en estos 33 países durante 14 días antes de su intención de viaje a Estados Unidos, no pueden ingresar al país del norte.
Los problemas de aprobación de la Sputnik V
En Argentina la vacuna rusa fue la primera vacuna aprobada contra el coronavirus, de esta manera logró ser uno de los pilares de la vacunación en nuestro país. Sin embargo, dicho fármaco encuentra problemas para obtener la aprobación final de la OMS.
La OMS había advertido que en una fábrica de Pharmstandard en la ciudad rusa de Ufa, había encontrado múltiples infracciones que generaban preocupación con la “implementación de medidas adecuadas para mitigar los riesgos de contaminación cruzada” lo que generó la suspensión de la aprobación. Ante esta situación la planta dijo que ya había abordado sus cuestionamientos y que los inspectores no habían impugnado la seguridad o eficacia de la vacuna. Pero científicos independientes expresaron que las fallas en la fabricación podrían comprometer la calidad de la vacuna.
En una conferencia de prensa de la Organización Panamericana de la Salud, una rama regional de la OMS, el subdirector Jarbas Barbosa afirmó que se detectaron una serie de infracciones en la fabricación de la vacuna rusa durante una inspección de la OMS en Rusia.
La OMS dijo que todavía estaba esperando una actualización de Pharmstandard, y sugirió que se requerirían nuevas inspecciones de las instalaciones antes de que el organismo otorgara la aprobación del Sputnik V.