El femicidio de Florencia Romano (14) genera consternación e indignación en la sociedad. El brutal asesinato de la niña de Rodeo de la Cruz, y por el que está imputado Pablo Arancibia (33) -dueño de la casa de Maipú a la que llegó Florencia el sábado 12 de diciembre, y donde un vecino denunció al 911 haber escuchado gritos y una situación de violencia de género, aunque la operadora cortó la comunicación- es un tema del que habla todo el país. Y las críticas hacia el accionar de las autoridades de Seguridad no dejan de brotar.
Durante la tarde de ayer, luego de que se conociera públicamente que Arancibia había sido trasladado al Hospital Psiquiátrico de El Sauce para evaluar su estado -hay versiones que sostienen que Arancibia había amenazado con quitarse la vida en reiteradas oportunidades y por eso fue derivado al efector de salud-; hubo una convocatoria y una manifestación en el hospital. Un grupo de mujeres se congregó en el lugar para reclamar -según sus palabras- que no se le brinde protección al imputado por el femicidio; y que se lo traslade a una cárcel común (algo que ocurrió también ayer, una vez finalizada la evaluación, y cuando Arancibia regresó al sector de admisión de la cárcel de Boulogne Sur Mer).
Además de manifestarse, cortaron las calles de las inmediaciones del hospital para repudiar las idas y vueltas y todos los procedimientos que -consideraron- dilatan la detención efectiva del imputado por femicidio. En ese sentido, destacaron que el malestar es porque -en general- cualquier imputado o condenado por femicidios o delitos sexuales es trasladado al pabellón judicial de El Sauce en lugar de ser alojado en las cárceles tradicionales.
Denuncias de represión
También durante la tarde de ayer hubo incidentes en ese lugar del departamento de Guaymallén. Y es que según denunciaron las manifestantes -y mostraron en videos compartidos en distintas redes sociales-, efectivos policiales que se encontraban en el lugar custodiando a Arancibia hasta que sea regresado a la cárcel reprimieron a las manifestantes en los momentos en que exigían que no se le brinde protección especial.
Según denunciaron las manifestantes -y también se puede ver en los mencionados videos-, los uniformados reprimieron a las mujeres disparando balas de gomas. Y algunas de ellas fueron demoradas por efectivos policiales; por lo que compañeras, amigas y familiares de las mujeres montaron guardias exigiendo que sean liberadas.
La versión de la Policía
Desde el Ministerio de Seguridad, en tanto, confirmaron que se registraron incidentes durante la tarde del lunes. Según explicaron desde la dependencia, la tensión y el conflicto se generó luego de que las manifestantes ingresaran al hospital para reclamar.
“Ingresaron a un lugar donde no se puede estar o permanecer, salvo familiares autorizados de los pacientes. Pero está prohibido, es un área restringida. En el pabellón judicial, los detenidos son alojados en una celda. Y la gente no puede ingresar de ninguna manera, ya que es un lugar de detención”, explicaron desde Seguridad. Además, destacaron que el traslado de Arancibia no fue por una cuestión de protección; sino para poder realizarle a Arancibia los estudios pertinentes. “Ni bien se completaron los estudios, regresó a admisión de la cárcel de Boulogne Sur Mer”, explicaron.