Mariana Terrera es vecina de El Algarrobal de Arriba, en Las Heras, y está sufriendo en carne propia los inconvenientes que está generando la acumulación de basura en su barrio a raíz del conflicto con los recolectores.
“Esto es una mugre, un asco, una cochinada. Más allá del olor nauseabundo y de las acequias que comenzaron a recibir desechos, hay moscardones y perros sueltos que rompen las bolsas. No se puede más”, expresó la mujer a Los Andes, para comentar que muchísimos vecinos no se quejan porque están resignados.
“Yo, en cambio, llamo al municipio en forma permanente. Porque esto es un descontrol, no dá para más. La solución todavía no llegó”, dijo Mariana, que es mamá y vive sobre la calle General Paz.
Desde el lunes pasado los vecinos están “aguantando” esta situación. “Cuando nos acordemos habrá pasado una semana”, sostuvo
Liliana, quien prefirió no mencionar su apellido, dijo que entre todos los vecinos intentan ayudar y ser lo más “higiénicos” posible.
“Por mi parte, llevo los desechos a un basural, pero igual todo es un asco, los canastos están repletos y las bolsas rotas por los perros. Vivimos entre la basura”, argumentó.
Liliana tiene un merendero en su casa del barrio Victoria y los desperdicios que genera son mayores a los normales. “Un desastre”, sintetizó.
Por su parte, Gabriela Carmona, a cargo de un comedor comunitaria donde tres veces por semana se retiran alrededor de mil viandas, dijo que pasaron las 48 horas que se habían anunciado sin recolección “y seguimos en la misma”.
“Es horrible vivir así, los canastos desbordan y toda la cuadra está de la misma manera. Hablamos entre los vecinos, estamos todos preocupados y soportando esta situación que hasta es peligrosa por lo antihigiénica”, sostuvo.
Dijo, además, es que difícil cumplir las mínimas reglas de limpieza e higiene en un comedor, donde en forma permanente se producen desechos.
Tal como se ha venido informando, la suspensión de la recolección de basura en Las Heras se dio por una medida gremial.
El Sindicato de Camioneros decidió que no se levanten más residuos en la comuna desde las 21 del pasado domingo, en reclamo por trabajadores que, según explicaron, no están cobrando sus sueldos y quedaron sin cobertura de obra social.
Una gran cantidad de barrios populosos de este departamento quedaron sin ese servicio básico y elemental desde ese día hasta hoy, es decir, se transita la tercera jornada de medida gremial.
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