Que la sustentabilidad sea parte de la agenda empresarial y que se trabaje en todas las áreas de una compañía y en los eslabones de su cadena de valor ya no es una tendencia. Es una necesidad.
En el mundo corporativo todos coinciden en que hacerlo “robustece” el negocio. Pero para que el círculo sea realmente virtuoso, hay que medir lo que se instrumenta, gestionar los datos y transparentar esos resultados.
Cada vez más consumidores e inversores reclaman esta información, que suele ganar validez por medio de certificaciones. En definitiva, quieren saber en qué y cómo impactan las acciones corporativas, una demanda que es transversal a todos los sectores de la economía.
“El momento de trabajar en sostenibilidad es hoy; están las condiciones. El tema vino para quedarse; nos mejora como personas, potencia los negocios, hace que tomemos responsabilidad de los impactos que generamos”, explicó Belén Arce (Sustainability Senior Manager de Accenture Argentina) durante el panel del ciclo “Voces que suman” que apuntó a repensar la sustentabilidad.
También participaron Lucas Gumierato (gerente general de Epec), Diego Sabat (director de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Grupo Libertad) y Gonzalo Parga (director del Grupo Edisur), quienes compartieron visión y experiencias.
El panel fue moderado por el periodista Daniel Alonso, coordinador del ciclo que cuenta con la producción ejecutiva de Sebastián Gilli y la colaboración de Marcela Rosatti.
Sabat se definió “optimista” respecto a cómo gana terreno y cumple objetivos la sustentabilidad en el mundo empresario. Grupo Libertad inició una ruta en el mundo del retail hace ya varios años, alineado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y adherido a la red Pacto Global Argentina.
Una de sus puertas de ingreso fue la de la eficiencia energética, con el horizonte de la carbono neutralidad. “Cuando certificamos la ISO 50.001, el accionista nos pidió que en cinco años la tuviéramos en los 14 centros comerciales de todo el país. Claramente, lo que no se mide no tiene entidad. La sustentabilidad hace más robusto el negocio y empieza a contribuir en la marca empleadora”, destacó.
En el roadmap fueron sumando más eslabones, con un enfoque “integral, con un pacto circular y con la meta de llegar en 2050 a la basura cero”, añadió. Sabat.
Una nueva escala
Uno de los drivers que está impulsando acciones de mayor impacto es la necesidad de acelerar para acercarse a las metas planteadas. En el caso de Grupo Libertad, la nueva escala viene por el lado de los residuos.
Los sólidos y secos son, si se quiere, más fáciles de tratar en circuitos de regeneración y reconversión en nuevos productos. El desafío es el resto, básicamente los provenientes de la cadena de proveedores y los orgánicos.
“Hicimos alianzas, llevamos adelante acciones de cooperación, de interacción público-privada con el Ente BioCórdoba, con la productora de energía limpia Helios, que los transforma en biogás; y con Terra, que hace compost para nuevas plantaciones de árboles afuera de la ciudad”, detalló Sabat, quien subrayó que “siguen explorando, convencidos de que los residuos ya no son un desecho, sino insumos de nuevos productos”.
En el caso de Epec –empresa estatal de energía de Córdoba–, Gumierato planteó que decidieron que uno de los principales focos de la compañía, que es la prestación de servicios, no podía realizarse “a cualquier costo”.
Fue entonces que empezaron a medir los diferentes impactos que producen cada una de las unidades de negocio (generación, transporte y distribución). “En 2022, sin computar la generación, producimos 1,3 millones de toneladas de carbono equivalente. Es muchísimo. En ese contexto se toman acciones bien específicas”, indicó.
Entre otros puntos, mencionó la migración de la flota de 400 vehículos a biodiésel y bioetanol (está finalizando una planta productora de biocombustibles en el predio de la vieja central de Pilar).
Además, comenzó la instalación de medidores inteligentes (llevan colocados 200 mil y cinco años es el plazo para completar a todos los clientes) y se avanza en el plan para la construcción de una estación transformadora “verde”.
Parga, por su parte, destacó que Edisur es la única desarrollista en la Argentina y una de las primeras en Latinoamérica en obtener la certificación “Leed for Cities and Communities” para la urbanización Manantiales, el emprendimiento de 1.500 hectáreas en la zona suroeste de la ciudad de Córdoba.
“La sustentabilidad está presente en todas las iniciativas que encaramos; la certificación es un paso más, nos permite evaluar lo que hacemos, pero todavía quedan desafíos por delante”, explicó.
Entre los puntos que se ponderaron para la certificación están el de sistemas naturales y hábitat, que en el caso del desarrollo fue “muy valorado, ya que era un área muy degradada que se hizo espacio verde de uso público”.
También el uso de suelo y transporte. “Se valora mucho el uso mixto, el que haya viviendas, locales y plazas”, indicó.
Agregó que hay otros focos, como el de los materiales que se usan y la gestión de residuos, por lo que es necesario “trabajar en conjunto, ya sea con el Municipio y con los vecinos”.
En esa línea, consideró que “es muy importante la colaboración, contar con aliados, incluso con prestadores de servicios, por lo que hay convenios que se hacen por la escala que requieren algunas obras que impactan en el entorno y con proveedores”.
Finalmente, consideró que “hay atraso en el acceso a la información, en qué acciones se pueden hacer para ganar sustentabilidad; el desafío es la educación”.
Y apuntó: “Hay que comunicar a los clientes el impacto que puede tener un proyecto u otro para que valore las diferencias. Esta es una tendencia que viene para quedarse, las viviendas certificadas, que pueden medir, cotizan más”.
Incentivos y aliados
Belén Arce –entre su amplio abanico de servicio, Accenture también asesora y acompaña en estrategias de sustentabilidad– planteó que descarbonizar ya no es una opción, sino que las compañías están “obligadas por los compromisos que asumen, porque quieren exportar, y ese camino alcanza también a sus proveedores”.
La ejecutiva insistió en que, más allá de los casos puntuales, es clave la “colaboración; es un cambio que debe ser transformador, escalador, sostenido en el tiempo”.
Añadió que la tecnología es una “aliada fundamental” para estos procesos, por ejemplo, para dar trazabilidad de una cadena de valor a través del blockchain o para realizar seguimientos satelitales en materia de biodiversidad.
En el caso puntual de la inteligencia artificial (IA), apuntó que incentivan su gobernanza, su uso responsable y ético.
“Somos parte del movimiento green software, en el que se comparten buenas prácticas para democratizar el conocimiento, pero consideramos que si bien la IA es una aliada para muchas actividades de la vida diaria, entrenarla es el equivalente al consumo energético de 120 hogares, por eso hay que entrenarla sabiendo qué uso le vamos a dar, que sea responsable, entendiendo el impacto de la huella”, resumió.
Gumierato también puso de relieve los proyectos de generación renovable. Epec cuenta con 11 contratos entre fuentes solares, pequeños emprendimientos hidroeléctricos y dos de biogás, a lo que se suma la tarea que vienen haciendo para promover la movilidad sustentable. En Córdoba hay ocho cargadores para vehículos eléctricos, de uso libre y gratuito, pero se espera llegar a 50.
Además, destacó el programa de generación distribuida comunitaria, que permite a los usuarios agruparse para montarse a una red de energía renovable, un esquema clave por doble vía: ayuda en zonas en las que los costos de la infraestructura tradicional son altos y diversifica el uso de fuentes en centros urbanos.
Voces en el panel
Diego Sabat, director de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Grupo Libertad
La sustentabilidad hace más robusto el negocio
“Como empresa nos desafiamos para ir cada vez por más en materia de sostenibilidad; el trabajo que hacemos es transversal a todas nuestras áreas y también a quienes integran nuestra cadena de valor. La sustentabilidad hace más robusto el negocio, empieza a contribuir en la marca empleadora, porque quienes podrían ser nuestros próximos colaboradores, lo valoran. Empezamos la tarea por el consumo de energía y fuimos avanzando en un enfoque integral. Instrumentamos alianzas, llevamos adelante acciones de cooperación, de interacción público- privada. Hay tres conceptos clave: comunicación (hay que impactar en el metro cuadrado de cada organización, que cada colaborador conozca la estrategia de sostenibilidad); extender las tareas, la capacitación y el compromiso a toda la cadena de valor; y la certificación: medir, conocer, es crucial”.
Belén Arce, Sustainability Senior Manager de Accenture Argentina
Atraviesa el ADN de las compañías
“La sustentabilidad dejó de ser un tema periférico en la agenda de las empresas, hoy atraviesa el ADN de las compañías. En una medición que realizamos, el 98% de los CEOs del mundo la tiene en su agenda, toma decisiones en esa órbita. Es en todas las industrias, en todos los países. Hoy se mira la sustentabilidad; no hacerlo significa estar complicado para atraer inversiones, para sostener clientes, para contener y retener recursos humanos, talentos. La sustentabilidad es buen negocio. Hasta hace unos años se la entendía como hacerse cargo de una forma voluntaria, cuando se tenía tiempo, de los impactos que generaban las actividades de las empresas. Eso no va más. Y la clave es entender que lo que no se puede medir, no se puede mejorar. Entonces, hay objetivos de performance, indicadores que debe llevar adelante la compañía”.
Lucas Gumierato, gerente general de Epec
Prestar servicios, pero no a cualquier costo
“Epec es una empresa focalizada en el servicio de un sector necesario para el desarrollo provincial y en ese marco pensamos la sustentabilidad económica, ambiental y social. Hemos encarado un conjunto de ejes estratégicos, en el marco del pacto global de la Agenda 2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y hacemos inversiones en esa línea. Nuestro ADN es la prestación del servicio, pero le tuvimos que poner la sustentabilidad; es prestar servicios, pero no a cualquier costo. Llevamos publicado el cuarto reporte de sustentabilidad, que es auditado por organismos internacionales. No sólo lo presentamos en la Red Argentina del Pacto Global, que además integramos, sino que está a disposición de todos. En ese documento abrimos la compañía para que todos puedan acceder y allí están los objetivos específicos definidos”.
Gonzalo Parga, director de Grupo Edisur
Hay que trabajar en conjunto y con alianzas
“La industria de la construcción abarca muchos jugadores que intervienen en el resultado final del sector, desde los materiales al diseño y también hasta el uso y operación de los espacios. Y eso es un factor a tener en cuenta a la hora de avanzar en la sustentabilidad. Como empresa, ingresamos al mundo de las certificaciones con el cambio de escala: Manantiales es un desarrollo en la zona sur de la ciudad de Córdoba de unas 1.150 hectáreas. Certificar una norma en desarrollo urbanístico –Leed for Cities and Communities– nos dio la posibilidad de ordenar, comunicar y transparentar el impacto que generamos con nuestra actividad. Además, nos planteó un desafío por delante. Fue un proceso de tres años y quedan compromisos por delante para cumplir para los que hay que trabajar en conjunto, con alianzas, ya sea con el municipio o con los vecinos”.