En medio de una próxima anexión de más territorios luego de los referendos celebrados en las regiones prorrusas en Ucrania, EE.UU. marca posición y alarma a sus ciudadanos.
Las autoridades alemanas consideran que los daños no podrán repararse rápidamente y las aguas marinas se filtrarán en las tuberías, lo que provocará una corrosión irreversible.
Finalizada la consulta popular con resultados contundentes en las 4 ciudades en disputa, Putin tiene vía libre para proceder con la anexión. Los líderes prorrusos de cada ciudad viajan para formalizar la decisión.
Luego de que Alejandro Astesiano, jefe de la custodia del presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, fuera arrestado en el marco de un escándalo que involucra a ciudadanos rusos y uruguayos, Zelenski salió al cruce por ser Uruguay uno de los supervisores de los referendos rusos.
Moscú prevé formalizar el viernes la incorporación de este territorio a su federación, aunque Kiev insiste en que no cambiará su estrategia en la guerra.
Si el resultado es positivo, alrededor de cinco millones de personas podrían convertirse en ciudadanos rusos.
El presidente ucraniano aprovechó su momento ante la asamblea general y pidió más sanciones y más armas para su país.
Representantes sindicales indicaron que unas 10.000 personas se concentraron en Bruselas para manifestar su descontento.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Türkiye calificó de “hechos consumados ilegítimos” estos intentos y advirtió que “no serán reconocidos por la comunidad internacional”.
Ha explicado que las actividades relativas a esta movilización arrancan este mismo miércoles y que solo los reservistas, principalmente aquellos con experiencia, serán llamados a filas. Por otro lado, afirma que los objetivos en Ucrania “siguen sin cambios” y acusa a Occidente de presionar a Kiev para atacar territorio ruso.
No habrá ningún golpe a las tropas rusas desde Bielorrusia, aseguró el presidente de ese país, Alexander Lukashenko.
El primer ministro indio, Narendra Modi, se ha sumado a Xi Jinping y ha mostrado sus “preocupaciones” por el conflicto: “No es momento para una guerra”.
El presidente ruso agradeció a China, en la primera reunión entre ambos desde febrero, su “posición equilibrada” respecto a la guerra en Ucrania. El presidente chino se mostró dispuesto a trabajar con Rusia.
Ursula von der Leyen dirigió un discurso sobre el estado de la Unión Europea ante la Eurocámara centrado en la guerra en Ucrania, país que visitará de nuevo hoy mismo. “No es momento de apaciguamiento”, dijo.
Al mismo tiempo, Rusia acusa a Alemania de haber “cruzado una línea roja” al proveer de armas letales a Ucrania.
Las tropas ucranianas han acabado en las últimas dos semanas con más de 1.800 “invasores rusos en el sur” del país.
El secretario de Estado es el funcionario estadounidense de más alto rango que ha visitado Ucrania desde que comenzó la Operación Mlitar Especial el pasado 24 de febrero.
Las imágenes que circularon en redes sociales mostraban cómo el avión se precipitaba a tierra, aunque Fedorovych, el ucraniano, no aparecía en el video. Debido a la hazaña recibió una medalla por su “ayuda en la protección de la frontera estatal”.
El presidente ruso ha tachado de “tontería” el plan de la UE de poner techo al precio del gas. “Aumentará los precios”, señaló.
El objetivo es cortar “la principal fuente de ingresos rusa” y obligar a que baje el precio del crudo de Moscú, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
“Esto reducirá significativamente el número de nuevos visados emitidos por los Estados miembros de la UE. Va a ser más difícil, va a llevar más tiempo”, aseguró Josep Borrell.
Además, ambas partes han acordado que la cantidad adicional de gas llegará por el sur, a través del gasoducto TurkStream, que atraviesa Turquía y Serbia.
