Opinión
El fastidio de Suárez y una visita no electoral que sí lo fue
Desde el punto de vista institucional el desplante del gobernador al presidente, estuvo mal. Pero en general a ningún mendocino de a pie parece molestarle esa actitud, más bien le agradó. La estrategia de Omar De Marchi podría llegar a tener dos opciones: competir por afuera o directamente volver a acordar las listas con el radicalismo para calmar el oleaje interno. Nada está dicho.