Según datos del Instituto de Desarrollo Rural los costos operativos implican más de $ 460 mil por hectárea. A esto hay que sumar riego por goteo, para lograr alcanzar los rendimientos óptimos.
Este tipo de tomate ha crecido en los últimos años por una demanda insatisfecha en el país. Las fábricas argentinas trabajan alrededor de 650 mil toneladas de tomate.
El autor de esta nota asegura que es necesario trabajar sobre cambios estructurales para comenzar a mejorar los rendimientos por hectárea. Estima que se deben adaptar nuevas tecnologías.
El acaricida combate las plagas en los cultivos, especialmente en épocas de temperatura elevada y días secos.
Referentes de diferentes sectores analizaron la realidad de la provincia y plantearon sus desafíos. En líneas generales hay optimismo.
Esta temporada se espera levantar 82.000 toneladas, un 26% menos que las 111.000 t de la cosecha anterior. Las contingencias climáticas y el descuido de cultivos, provocaron la merma.
El sector llegó a cosechar 120 mil toneladas en 2009 pero, tras la caída en la superficie, problemas climáticos y falta de inversión, se esperan solo 15 mil toneladas esta temporada.
Entre los problemas que vienen desde hace años y algunos logros recientes, la agroindustria local analiza cómo recibe el año y cuáles son sus objetivos.
La humedad es propicia para que surjan enfermedades como Monilia o la Viruela holandesa. De por sí, ya se esperaba una menor cosecha que en la temporada pasada y las precipitaciones complican el panorama.
El autor de la nota escribe sobre los pagos que se le realizan a los productores frutícolas y vitivinícolas y su impacto.
La Unión Frutihortícola Argentina hizo una especial advertencia sobre lo que sucede por fuera de lo que podría ser interpretado como un alivio para el bolsillo de los mendocinos. ¿Cuánto cuesta la fruta y la verdura en Mendoza?
Las bajas temperaturas registraron daños de hasta 90% en producciones de ciruela para industria, por lo que 2022 sería otro año de mala cosecha. En el acumulado hasta agosto, la exportación cayó en volumen 52%.
Son tantas las dudas que es inevitable plantearse si realmente es posible elaborar y, sobre todo, ejecutar planes.
El IDR presentó datos de este cultivo, que entre 2017 y 2020 redujo su superficie 23% en la provincia. Productores e industriales apuestan por la integración frente a los problemas internos.
Con una demanda local insatisfecha, productores se animan a probar con nuevas variedades y con sistemas de hidroponia. El consumo crece, pero hay que evaluar bien los costos y los canales de venta.
Los frutos rojos son una alternativa para fincas pequeñas, con una mano de obra intensiva y productos de buen precio. Las innovaciones locales.
Las malezas afectan directa e indirectamente al cultivo, compitiendo principalmente por los recursos como el agua, la luz y los nutrientes. En economías regionales, esto implica un gasto importante en jornales que, en el último tiempo, ha pasado a ser un factor determinante.
Con nuevos montes implantados y la plena producción de otros recientes, se espera crecer en alrededor de 600 toneladas. Preocupación por las heladas tardías, la falta de agua y la inseguridad.
Alain Boulet, especialista en fruticultura, explicó de manera muy instructiva cuales son las falencias más comunes que se pueden encontrar en este procesos.
El presidente de la Cámara de Cerezas de Mendoza habló de la realidad de un sector que crece en medio de la crisis y la pandemia.
El autor asegura que es necesario trabajar en un programa de gestión basado en la preparación del suelo, alta densidad de plantación, riego y nutrición. Una propuesta innovadora.
La fruticultura local avanza mientras prueba nuevas plantas y busca, además de una mayor productividad, tener cosechas más tempranas.
