Todo resuelto, todo listo, todo fácil, todo lindo. Cuatro premisas a bordo de un crucero. Y sí, hay momentos en los que es necesario desentenderse de todo, literalmente. Y que alguien más se encargue hasta del más mínimo arreglo. Pues bien, estos increíbles barcos que surcan los mares y que anclan en el puerto de Buenos Aires, garantizan que no hay nada de qué ocuparse y que todo está planificado y resuelto. Acaso, la sensación que muchos ansían tras un año de trabajo duro, tensiones y estrés. Así, las jornadas a bordo transcurren en un marco de rélax total. Por la mañana se chequea el diario que se distribuye en todos los camarotes (más de 1.500 en algunos buques; para que se figure las dimensiones) y en el que se publican las actividades del día. Las hay a toda hora, para todas las edades y para todos los gustos.Entonces los activos pueden dirigirse a las clases de baile; los meditabundos, a las de yoga, sólo por nombrar unas. El que no quiere compromisos, con un buen libro en la mano puede escoger cualquiera de los espacios de cubierta para acomodarse en una poltrona y dejarse llevar, por la literatura y por las olas.
Subir y bajar
Durante los días de navegación, las piscinas son espacios requeridos por varios. Es que parece que estar rodeados de agua aumenta los deseos de nadar o de pasar un rato en el jacuzzi. Por lo demás, la constante sigue. Es decir, no hay que ocuparse absolutamente de nada. Por ejemplo, están disponibles los toallones y las batas. Los mozos están prestos para acercar, hasta la reposera, la bebida que se desee.
En tanto, si se sienten deseos de comer algo, las barras cercanas a las piscinas rebosan de frutas y menúes menos saludables, que los niños y adolescentes disfrutan sin culpas. También hamburguesas y papas fritas y la vera pizza italiana.
5 jacuzzis y 4 piscinas -dos de ellas con cubierta retráctil- son los entornos en los que la onda es pasarla bien, por lo que animadores muy carismáticos invitan esporádicamente a sumarse en algún juego o baile. Cada quien responde como quiere: a bailar o a seguir leyendo. La clave, siempre es el disfrute y cada quien lo hace a su manera.
En tanto, cuando el barco toca algún puerto, es preciso descender para hacer la excursión. Previamente los coordinadores han asesorado a los interesados, quienes ya saben el punto de encuentro y horario para la partida. La puntualidad, una condición indispensable: para bajar y más aún para volver a abordar el crucero, al regreso del paseo por tierra.
"El barco no espera a nadie", repiten a modo de consigna los guías. Lo cierto es que nadie quiere quedarse en tierra. Todos quieren volver para seguir dejándose llevar.
Un mundo de servicios
Desentenderse totalmente del asunto de la comida es una de las cosas que más placer provocan, especialmente entre las damas. Sin desatender la perspectiva de género, la realidad muestra que por lo general son las mujeres las encargadas de proveer los alimentos, inclusive de vacaciones -y ni hablar si hay niños de por medio-. Pues bien, en un crucero ése no es un tema. Desde el desayuno hasta la cena y sin olvidar los after, cada huésped tiene a su disposición varias alternativas para cada momento. Comidas rápidas o saludables, restaurantes informales y otros muy paquetes, confiterías y bufets, sólo se trata de ver cuál es el que más le provoca.
Hablando claro, por ejemplo, el Costa Pacífica -de Costa Cruceros- dispone de 5 restaurantes, incluyendo el Club Blue Moon y el Restaurante Samsara, el único con cargo adicional y con reserva previa. Además de 13 bares, entre ellos un Cognac & Cigar Bar y un Coffee & Chocolate Bar.
Sentirse atendido excede al ámbito de los alimentos. Claro está que hay mucho más. A saber: los que viajan con niños cuentan con el Squok Club con piscina infantil, una suerte de guardería donde los chicos la pasan súper. En tanto los padres los dejan tranquilos porque están todas las condiciones de seguridad previstas. Pista polideportiva y circuito de jogging y patinaje al aire libre para los que no pueden dejar de entrenarse, aun cuando están de vacaciones. Nada para desestimar si se tiene en cuenta que los cruceristas suelen engordar más de 2 kilos durante la travesía. Y bueno, si la comida que sirven es deliciosa. En el otro extremo, para una sensación de relajación total, está el Samsara Spa. Un espacio de 6.000 m2 en dos plantas, con gimnasio, termas, piscina de talasoterapia, salas de tratamientos, sauna, baño turco y solarium de rayos UVA.
La noche sin fin
Un espectáculo en el teatro antes de la cena, una velada inolvidable en alguno de los restaurantes, unas fichas en el casino, para los no tan jóvenes. Los que nacieron en este milenio -o los que tienen ese espíritu-, de seguro pasan por el simulador de Grand Prix, rumbean para la discoteca y terminan comiendo una hamburguesa en alguno de los bares, a la madrugada. A toda hora, las consignas se repiten: servicios, atención y diversidad.
Temporada 2016/2017
Esta temporada 2017, la nave que llegará al puerto de Buenos Aires para realizar los itinerarios en Sudamérica es el Costa Pacífica. Con sus 114.500 toneladas y capacidad para 3.500 pasajeros, arribará el 16 de diciembre.
Los itinerarios llegarán a Brasil y Uruguay, entre los que habrá divertidos mini cruceros a Punta del Este de 3 noches, cruceros a Río y Angra de 8 noches e increíbles transatlánticos de 20 y 22 noches
Las salidas de 8 noches están previstas para los días 20 y 28 de diciembre. En tanto en enero los días 5; 13; 21 y 29 y en febrero el 6 y 14.
Las partidas de los mini cruceros de 3 noches: 17 de diciembre y 22 de febrero.
La tarifa de 8 noches parte de U$S 997 + impuestos por persona en base doble. Y la de 3 noches (mini cruceros) U$S 349 + impuestos por persona, en base doble.
Si bien es cierto que éste fue un año negativo para el turismo, desde Costa Cruceros tienen muy buenas expectativas para 2017. De esta manera esperan que embarquen 35.000 pasajeros en Buenos Aires y Montevideo.
Novedades
Costa Cruceros tiene algunas novedades, como por ejemplo los itinerarios al Caribe, al Mediterráneo o Dubai, entre otros. Asimismo indicaron que "trabajamos para que los huéspedes a bordo reciban hospitalidad y servicio de alta calidad, con entretenimiento para todas las edades, la mejor gastronomía, y un trato personalizado y diferencial". Otro de los lanzamientos es el crucero temático: el primero de la compañía con salida desde Buenos Aires, que ofrecerá una amplia cantidad de atracciones entre las que se destaca la presencia del reconocido Chef Donato de Santis, quien realizará su Pasta Show, una entretenida competencia entre los huéspedes adultos y niños y deliciosas degustaciones a bordo. Este exclusivo viaje también contará con la presencia de Juan Carlos Copes, quien brindará un show de tango con su inconfundible estilo internacional.
En el resto de la región se incluirán otros cruceros temáticos, como Danzando in Brasil o Tango en el Mediterráneo.