Esta abuela se llama Livia, tiene 80 años y se sometió a las manos mágicas de su nieta quien le dijo que ella podía y merecía lucir mucho mejor. La nieta es una maquilladora llamada Tea Flego quien se basó en la técnica del contouring que impuso Kim Kardashian.
Se trata de usar sombras y luces en diferentes partes del rostro para tapar y resaltar las facciones. La nieta subió las fotos a Instagram y mostró el antes y el después. Sus fotos revolucionaron las redes.
Así quedó la abuela canchera: